Una Finca Biodinámica en Perú

Hace muchos años, cuando recién terminaba la universidad tuve la gran suerte de llegar a un finca diferente,  maravillosamente diferente a lo que me habían enseñado, desde sus prácticas hasta su sentimiento como cuerpo vivo. Se llamaba Monte Fértil y fue mi primera relación con la agricultura biodinámica. Conocí al autor de la siguiente nota, a Pedro, quien pinceló aquella huerta oasis en Pachacamac, al sur de Lima. Dejo que Pedro Otero nos cuente con sus palabras sobre esta finca Biodinámica que es parte de la historia de la agricultura ecológica en Perú. (César De la Cruz)

 

Una Finca Biodinámica en Perú

Hace algunos años, regresando de Brasil de realizar un periodo de prácticas profesionales en varias “fazendas” biodinámicas, me encontré, por un azar de la vida, con la posibilidad de construir desde cero, una huerta biodinámica sobre una hectaréa.

Franja costera, cerca a Lima en un valle maravilloso q estuvo regido por el mayor oráculo inca en su época. Pachacamac, es un típico valle irrigado por el río Lurin, de corto recorrido que nace en la cordillera de Los Andes y desemboca en el Océano Pacífico.

El diseño de la finca surgió como quien pinta un cuadro. Dividí el espacio para los componentes principales : las hortalizas y hierbas aromáticas, el vivero de almácigos y propagación, la alfalfa para los carneros y conejos, unos corrales para éstos, la zona del compostaje, el jardín de bienvenida que iría a ser el área que acoge, donde socializas, explicas, fraternizas e intentas disolver las tensiones. Se perforó un pozo para la obtención de agua del subsuelo que nos permitiera regar con la lámina de agua que cubriera correctamente el requerimiento de los cultivos hortícolas. Adyacente al pozo se construyó una salita de cosecha para el lavado de las verduras y confección de las canastas que iríamos a repartir en Lima, que era la principal actividad económica.

No contábamos con el mejor suelo, todo lo contrario, una arenisca pedregosa de ladera de cerro, que fue mudando a través de los años con la incorporación del compost. Pero lo que fue difícil, o se demoró mucho, fue establecer la arboleda como cerco vivo, aquella “piel” que permea, que ensimisma, protege y diferencia a todo el organismo agropecuario biodinámico.

 

La idea del organismo la tenía clara pero me preocupaba como capacitar al personal que iba entrando a trabajar. Todo era nuevo, y si la agricultura orgánica era una reciente tendencia, incluso de soñadores, la biodinámica sonaba totalmente etérea. Pero ese era uno de los retos: demostrarlo. Trabajándolo día a día.

Lo más sutil; preparados, ciclos, ritmos, fuerzas y sustancias, había no que intelectualizarlas, sino que el trabajador de campo, el agricultor peruano tradicional, lo hiciera pasar por sus pies, por su sudor, por sus manos, por su corazón. Así lo fue comprendiendo, sintiéndolo, experimentándolo en él mismo.

Al tercer año, adquirimos media hectárea más y repartíamos 80 canastas semanales. Como el niño de tres años, ya podíamos decir: Yo, aquí estoy y camino bien!

Al sexto año, cuando Perú se liberó de las acciones del grupo terrorista Sendero Luminoso y se pudo transitar con total libertad por el valle, se agregaron seis hectáreas más en un anexo contiguo. Y pudimos incrementar a 200 canastas semanales el reparto en la ciudad, atendiendo a casas, restaurantes, hoteles, etc. Como arado que entra al barbecho, íbamos adentrándonos al mercado, que ya fortalecido por la surgente Bioferia de Miraflores, reconocían y apreciaban los productos.

El clima costero es bastante benigno aquí. Un invierno donde las temperaturas no bajan de 13° C y en verano no exceden los 33° C, nos permiten cultivar el año entero la mayoría de hortalizas. Y eso posibilita una venta constante y el poder cubrir los costos de producción y las obligaciones laborales .

Lo esencial fue programar bien las siembras. 30 ó 40 hortalizas, más las hierbas aromáticas debían ser sembradas con la frecuencia necesaria para que todas las semanas se pudiera cosechar por lo menos el 80 % de las variedades. El famoso calendario astronómico agrícola de Maria Thun fue una excelente herramienta. Muy útil, no solo porque los resultados que se ven en los cultivos son muy manifiestos, sino porque te dan un orden. Un orden básico para cuando realizar las siembras, trasplantes, cosechas y labores culturales. Y también cabe pensar que tus simples labores agrícolas se enmarcan en función de un orden cósmico del día, semana, mes o estación. Es como recibir al Cosmos en tu Huerta.

El ritmo diario siempre acompaña las labores de siembra y trasplante ya que para nosotros se refleja en él aquel conocimiento ancestral que considera que por la mañana la tierra exhala y las siembras se asemejan a las de primavera- verano. Y por la tarde la tierra de labor, inhala, teniendo las siembras el impulso semejante a cuando se planta en otoño-invierno.

En Biodinámica se busca siempre un equilibrio en el organismo agropecuario, en sus componentes, en las áreas de bosque y frutales, en los pastos y huerta, en la rotación de los cereales y las leguminosas, en la cantidad de animales que puedas alimentar bien, en la organización social, administrativa y cultural. Equilibrio que demora, pero que es trabajo de todos y se convierte en una meta común.

 

 

Los alimentos biodinámicos los consideramos de muy alta calidad. Provienen no solo de un cultivo bien llevado agronómicamente, sino de fuerzas cósmicas que se reflejan en la hoja de la hortaliza, en el tubérculo, en la fruta o en el grano del cereal. Fuerzas que el agricultor biológico-dinámico sabe traer por medio de los Preparados, sabe cómo balancear sus minerales, su arcilla, como “conferir inteligencia a la tierra, como impregnarla de racionalidad” y sabe que la planta es metamorfosis pura.

Se comienza a vivir inmerso en este afán de conocer y profundizar en la vida de la Finca. Se convierte en una filosofía de vida en vez de una opción de trabajo. Hoy, el peso y la responsabilidad es mayor que hace 20 años dado el gran desbalance que existe en el medio ambiente. No se trata solo de ofrecer un alimento ecológico , es crear y sostener organismos agropecuarios que puedan ser autosostenibles y puedan perdurar el mayor tiempo posible y que todo el conjunto de personas, animales, plantas, construcciones físicas, maquinarias, flujo económico ,etc, tengan una dirección de beneficio para la comunidad, región y país donde este localizado y actuando.

 

Cada finca biodinámica va a ser diferente, cada grupo humano que la dirige le da una impronta que la caracteriza. Quienes o quien la maneja se convierten en directores creativos, porque constantemente se está creando y recreando sobre un mar de sucesos. En un medio como el de nosotros, en el cual todo el año se produce, encontrar la calma para soluciones siempre fue muy difícil.

Pero creo que cada uno, y cada grupo, tendrá que encontrar esos momentos de cambio de respiración, de metabolismo, de velocidad para recomenzar de nuevo con otro brillo.

Una pregunta que siempre surge es como relacionarnos con la comunidad: ¿Sólo vendiéndoles los productos ?

¿Qué actividades hacer para que la comunidad, llámense escuelas, estudiantes, familias, consumidores, vengan y participen con nosotros de la vida en la Finca ?

Ese nexo es necesario. Hay que crearlo, cultivarlo, porque es abrir el alma de la Finca, expandirla sobre la naturaleza agrícola hacia la salud física, mental y emocional de las personas relacionadas.

La comunidad y la tierra requieren hoy más que nunca REVITALIZARSE. Y esto debería constituir la columna del mayor esfuerzo y energía posible del grupo humano que integra y se relaciona con una Finca biodinámica, con un organismo vital.

 

Autor: Pedro Otero Pollit

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Comentarios

Requiero mayor información sobre agricultura biodinámica

Buenos días Juan Carlos, si puedes detallarnos qué tipo de información solicitas, ponte en contacto con nosotros a través de nuestro correo electrónico e intentaremos ayudarte, un saludo y muchas gracias por tu interés.

Correo electrónico RAG: rag@ecomercadogranada.org

Hola Juan Carlos, en la edición del 7 de abril estará presente en el Ecomercado Alonsi Navarro que practica la agricultura biodinámica. Él te podrá informar directamente sobre ella. Además, sabemos que él está en contacto con productores biodinámicos de diferentes partes de Andalucía y España. Pero tal como te hemos respondido antes, si nos escribes a rag@ecomercadogranada.org y nos especifícas un poco más qué es lo que necesitas, te podremos dar contactos e información. Una pregunta, desde dónde nos escribes, España, Perú, Latinoamérica?

Saludos

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